Los que esta mañana decidimos acercarnos al Vero Boquete para dar la bienvenida a la enésima ciclogénesis, disfrutamos del que para mí fue uno de los espectáculos deportivos más bonitos en años. Es la magia de la Copa. Los Ángel, Mellot o Tomeu parecieron menos ante un Compostela que jamás le perdió la cara al partido y que estuvo a punto de forzar la prórroga. Desde la llegada de Michel Alonso, los de la capital no paran de mejorar su imagen partido a partido, y comienzan a alimentar la esperanza de que una remontada es posible, eso sí, con permiso de un Zamora que si se disfraza de Arenteiro no tendrá rival esta temporada.
Beltrán, Borja, Kike o Hugo Matos, jugadores con menos minutos esta temporada, dieron toda una lección de trabajo y lucha por la causa dignas de un titular, mientras que los Caballé, Parapar o Euse demostraron un nivel posiblemente por encima de la categoría en la que militan. Más allá de bajas, decisiones arbitrales o diferencia de categoría, el Compostela hizo un encuentro sobresaliente que no pudo ratificar con mejor resultado, pero que demuestra el buen momento de los picheleiros de cara a su pelea por ansiado ascenso. Por cierto, la incorporación a la causa de jugadores como Landeira o Varela demuestra tanto la buena gestión de la cantera como defiende el planteamiento de una plantilla corta que maximice la inversión.
Lo que está dejando claro el míster ferrolano desde que llegó es que tenía muy claro cuáles eran las carencias de los santiagueses y cómo las solucionaría. Desde que llegó, trazó un plan ejecutado con maestría que ha dado la vuelta como un calcetín a la situación de los blanquiazules. Tanto el olfato de MBarré como la actitud de Beltrán, la eficiencia de la defensa o la productividad ofensiva, han mejorado al unísono como si todos los males tuvieran una única causa. Si hay algo en lo que destaco al nuevo míster de la SD es sin ninguna duda su valentía y decisión que con la pizca de suerte necesaria ha convertido en revolución positiva su llegada. Si la suerte no le abandona, muchos laureles le lloverán, al menos hasta que otros intangibles conviertan su trabajo en obra de arte. Todo el ánimo y apoyo desde aquí.
Y es que tampoco podemos olvidar que el pasado domingo ganamos 4-1 en casa al filial de otro segunda, el Valladolid, curiosamente próximo rival del Tenerife en la SmartBank. Un resultado que si bien tuvo sus condicionantes nos sirve mucho mejor para ver lo que el exformentera tiene pensado para nuestro club. Decía la semana pasada que este segundo partido nos serviría para establecer certezas, como que la defensa de tres centrales es innegociable a día de hoy para el míster o que los Juampa, MBarré y Parapar arriba serán marca de la casa. Eso sí, quedan algo más abiertas a variaciones los carrileros y centrocampistas. Ver a Jaime Santos por el carril derecho, o a Jordan sustituir a Antas fueron pinceladas que amplían miras sobre qué futbolistas pueden ocupar que posiciones, y multiplica las alternativas a pesar de las bajas. Con ese equipo, los de Santiago dominaron el juego sin ceder ocasiones hasta el gol visitante al borde del descanso que dio inicio al dominio visitante. Cuando el filial vallisoletano dio ese paso adelante a los de Santiago les tocó sufrir, aunque sin ceder tantos. Con el tercer gol obra de MBarré, se acabó el partido, desinflando a los visitantes y reforzando a los locales. Fue aquí cuando Michel nos regaló la variante que vimos esta mañana en todo el partido, que no fue otra que reforzar el centro del campo a costa de la delantera. Un 5-3-2 que se ha mostrado muy eficaz sobre todo cuando no hay una referencia clara en punta. Sin desmerecer lo anterior, lo cierto es que llevamos años sin alternativas visibles de juego que resultaran eficaces y coherentes con los medios disponibles. Otro milipunto para el míster de ferrolterra, que día a día se mete a más aficionados en el bolsillo, quién sabe, a lo mejor este año consiguen meter a 4.000 almas en el Vero Boquete en temporada regular, yo estoy abierto a soñar con Michel por que da argumentos.
Langreo será la próxima parada del bus blanquiazul para definir la tendencia del equipo picheleiro. Tercer partido en una semana y minutos repartidos, salvo para Casas y Euse que jugaron los dos partidos completos. Baja más que probable de Riki, recuperación de Soto, y pendientes de la evolución de MBarré y Fran. ¡Hasta la semana!!!
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