Soñando con un título (versión seria)

Hace un par de semanas su Ilustrísima se pasaba por un espacio deportivo radiofónico local. En dicha entrevista, El presidente blanquiazul no se cortó en afirmar que la SD buscaba el ascenso sin descartar pelear por el campeonato, y con rapidez muchos dijeron que era su papel, pero que el equipo tenía muy complicado terminar primero. Hoy nos hacemos eco esas palabras y las comentamos.

Evidentemente que con el Adarve de líder a muchos puntos de los picheleiros, y el Pontevedra segundo con vitola de gigante, el primer pensamiento es menospreciar las palabras del mandatario compostelano, aunque a nuestro parecer haya más cosas que ver tras esas palabras, empezando porque no deberían confundirse los objetivos con las medidas para lograrlo.

Es una cuestión de lenguaje. Por definición un objetivo es específico, pelear por ser campeón no lo es, quedar primero sí, del mismo modo que ascender sí lo es y quedar lo arriba posible no. Y es que en ningún momento de la entrevista el presidente del Compostela dice que el objetivo sea quedar campeón, se le tergiversa, asumiendo como objetivo la medida para lograr el ascenso, pelear por el campeonato. El objetivo fijado es el ascenso, y para alcanzarlo hay que terminar lo más arriba posible, a poder ser logrando el campeonato. 

Tampoco se tiene en cuenta que si bien los dos primeros clasificados ya han dado muestras de su mejor nivel, los de Santiago lo que han hecho es mostrarnos que tienen bastante capacidad de mejora, y eso para un equipo que es el virtual tercer clasificado puede ser algo más que importante. Entiendo que cualquier analista se fije en los datos y no atienda a potencialidades, no obstante, obviar este hecho de inicio es restarle bastante crédito a la plantilla y sobre todo a Rodri, como si el de Valdeorras no fuera quién de mejorar la situación de los capitalinos que se encuentran relativamente cerca del Pontevedra.

No se atiende tampoco al futuro rendimiento del misterioso Adarve. Si bien en el caso del Compos su potencial cambio es ascendente el de los madrileños puede ser descendente, y no porque lo estén haciendo mal, sino porque mantener ese nivel durante todo el campeonato parece complicado para un equipo de su presupuesto. Obviamente, esto también es una incógnita y habrá que ver de qué lado cae la moneda, pero borrarlo sistemáticamente de la ecuación nos parece también equivocado.

Y cómo no hablar de la alargada sombra del todopoderoso Pontevedra. Si bien los del Lérez superaron su mala arrancada, y son segundos con un presupuesto de ascenso y una racha envidiable, no están exentos de sufrir las inclemencias de la competición, en un grupo que se está mostrando de lo más igualado salvando el primer y último puesto. Se reconoce indudablemente el potencial del equipo granate, sin ninguna duda es probablemente el equipo con mejor plantilla del grupo, pero no es infalible, y pinchó como todos en el campo del líder cuando ya peleaba por encaramarse al liderato. Para un equipo para el que no ser primero ya es un fracaso, el peso de la clasificación puede costarle más disgustos que las alegrías que puedan reportarle los buenos resultados.

Y termino remarcando que el objetivo es el ascenso y que habrá un playoff para los segundos, terceros, cuartos y quintos de cada grupo. Este playoff se celebrará en dos rondas y en sede única, determinando los cruces por sorteo en cremallera evitando, en la medida de lo posible, enfrentamientos con equipos del mismo grupo. En cremallera quiere decir que en primera ronda se cruzan segundos con quintos y terceros con cuartos, por lo que la posición al final del torneo regular es muy importante. Si bien en los playoffs las fuerzas se equilibran y la suerte te puede garantizar una plaza en la siguiente categoría, no venía siendo común en temporadas anteriores en tercera y segunda B que los cuartos ascendieran. En Smartbank, con un sistema idéntico, sí que se ha visto que el que llega en mejor forma al playoff acaba ascendiendo aún quedando quinto o sexto. Al margen de esto, lo que es un hecho es que alzarse con el campeonato te da el premio del ascenso directo, y quedar lo más arriba posible te da más opciones de cara al playoff. Aunque lograr el campeonato sea un objetivo de máximos para el Compostela, el club santiagués se ha marcado el ascenso como meta realizable, por lo que pelear por el campeonato es por extensión una medida innegociable para alcanzar sus objetivos, que es exactamente lo mismo que ha dicho su Ilustrísima.

Con toda una segunda vuelta por delante, todo puede pasar, y si bien a priori pelear por el ascenso o incluso por el campeonato puede parecer un objetivo difícilmente alcanzable, no es para nada una quimera. Es cierto, por otro lado, que los de Rodri deben dar ese paso hacia la excelencia, definir de una vez por todas a qué quiere jugar, y hacerlo con constancia durante los noventa minutos del encuentro. En este sentido, será clave el partido del próximo domingo frente al Pontevedra, tras un larguísimo parón debido al aplazamiento del encuentro frente al Salamanca, y que debería haber servido como una minipretemporada para corregir defectos y potenciar virtudes. Sin lugar a dudas, los picheleiros deberían mostrar este domingo sobre el verde que realmente son una alternativa, que continúan creciendo, y que en esta segunda vuelta serán un equipo a temer.

Un partido el de este domingo, además, que ha sido catalogado como medio día del club. Los abonados del equipo blanquiazul deberán pasar por taquilla, y abonar 10 euros por asistir a un encuentro para el que todos sabíamos que habría que rascarse el bolsillo. Buen momento este para preguntarse si la medida de marketing es acertada. Con una afición muy fiel que te garantiza el millar de abonos sea cual sea el precio, ¿sale a cuenta abaratar el precio del abono para repercutirlo en mediodías del club y no incrementar considerablemente el número de abonados? Se decía que el club había hecho una buena campaña con la oferta de abonos de media temporada, ¿alguien había pensado que a ese precio había que sumarle los 15 o 20 euros que costarán los dos mediodías del club? Porque estas cosas son las que cabrean a la gente y hacen que la próxima vez no vuelvan. Podemos resguardarnos detrás de la letra pequeña como hacen los bancos, pero no pretendas tener mejor imagen que ellos, porque al final estás haciendo lo mismo. Las ofertas tienen que ser ofertas reales y no engañifas o triquiñuelas para intentar hacer picar al viandante. Una vez más me vuelvo a preguntar si están claros los objetivos de atracción, si el club ha estudiado a la clientela potencial para saber que es lo que espera y lo que quiere. No podemos olvidar que tenemos manchas muy oscuras en nuestro pasado, algunas muy difíciles de borrar que escarmentaron a muchísima gente y las mantiene alejadas del club, no solamente hay aparentar hay que ser. ¡Hasta la semana!!!