El pasado domingo llegué al campo sin saber muy bien de que iba a hablar hoy, pero tan pronto vi la alineación supe que ahí habría un post. Esta pasada jornada sufrimos, sufrimos mucho, y hoy os explico mi visión del porqué. Comenzamos
Hasta este pasado domingo Yago venía utilizando un 4-1-4-1 que, aunque con los defectos ya comentados semanas atrás, le estaba dando algún fruto. El míster hasta este momento sólo cambiaba de sistema cuando entorno al minuto 60 el resultado era incierto. En este momento sustituía a un mediocentro por un delantero y pasaba a un 4-4-2.
El 4-1-4-1 es un planteamiento que últimamente se emplea bastante porque te permite cambiar a un 4-2-3-1 o a un 4-3-3 según las circunstancias del partido y sin gastar cambios. Por eso el hecho de el míster dispondría un 4-2-3-1 no me resultó llamativo, pero si la posición de Mitogo por detrás de Santi. Como aclaró el míster tras el encuentro su intención era jugar con cuatro atacantes para tener mas ocasiones, lo que confirma lo que se vio sobre el terreno de juego. Aunque la disposición fuese un 4-2-3-1 sobre el papel no dejó de ser un 4-4-2 (4-2-4) encubierto en el campo.
Esta disposición, el 4-4-2, requiere de unos mediocentros muy versátiles que tiene que defender, bajar para subir el balón y apoyar en ataque con sus incorporaciones desde atrás. Además esta disposición puede generar inferioridad por dentro como así sucedió. Fueron Samu y Julián los más adecuados para este planteamiento?
En la primera parte As Pontes planteó un partido de repliegue con la línea de presión en el medio de campo y la línea defensiva en la frontal. Según las instrucciones del míster nuestra escuadra formó una linea de 4 atacantes arriba, generándose un agujero por dentro porque cuando un mediocentro bajaba para dar salida al balón el otro no lograba hacerse un hueco entre los contrarios. A pesar de ello, nuestros buenos delanteros sacaron algunas jugadas y posiblemente deberíamos haber terminado con más tantos a favor al final de la primera parte.
Tras el descanso el técnico visitante, que lee bien el partido, saca a un jugador de posesión para hacerse con ese erial y estira un poco más su equipo (subiendo un poco la linea de presión) para hacer el agujero más grande. Jugada maestra que nos saca del partido, nos roba el balón y nos empieza a crear peligro. El turno es para Yago que reacciona y pone a calentar a Tomás para tapar la hemorragia. Yo hubiera quitado a Martín o a Diego porque me parece un sacrilegio sacrificar a Mitogo, pero era una de las alternativas. Con un Tomás perdido y lento decidiendo, nos sumergimos en una pájara de campeonato. Los minutos pasaban y el público se desesperaba. Los chicos comenzaban a hacer la guerra por su cuenta sobre todo por fuera mientras Rubén seguía calentando. Angustia. Cambio, Yago da entrada a Make para que trate de arreglarlo, y lo consigue. Con Make llega el criterio y más velocidad de pensamiento, empezamos a espabilar pero los extremos siguen sin acompañar. Tuvimos que esperar al 77 para que saliera Rubén por Martín y mejorar otro poco más, lo suficiente para marcar. Sufrida victoria con una prueba muy verde que nos pudo costar un disgusto. Este fin de semana visitamos al Dubra, otro equipo que probablemente salga a defenderse.
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