Todo muy bonito, todo muy genial, pero tampoco debemos emozionarnos. Uno de los problemas que hay con algunos aficionados es el uso continuo de los extremos; cuando vamos mal somos el peor equipo del mundo mundial y así no llegamos a nada, vamos a descender a tercera porque no se puede descender más y vamos a sufrir. Pero cuando ganamos somos la caña y no va a haber equipo que nos plante cara, por eso tenemos que conseguir quedar entre los cuatro primeros porque algo menos sería una decepción. ¿En serio? Yo no es por fastidiar, pero he de decir que existe un lugar en el que ni somos la caña ni lo peor del mundo mundial. Ese lugar es... ¡el término medio!.
Recordemos que aún quedan muchos partidos difíciles, nadie dijo que fuera fácil. A ver, es cierto que somos el valeroso Compostela, pero también hay que tener en cuenta que somos unos recién ascendidos, ocupar la sexta plaza a final de temporada debería de ser el objetivo principal de este año, una vez consolidada esa plaza que venga lo que tiene que venir. Eso sí, he de deciros que lo que necesitaba este equipo era una victoria para arrancar y, teniendo el bloque que tenemos a día de hoy, podemos hacer grandes cosas... Pero preocupémonos de esa esperada sexta plaza que es nuestro principal objetivo. ¡Hala!¡a portarse bien!
Benvenidos al maravilloso mundo de los extremos compostelanos.
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