Ay, Filomena, Filomena…¡la que has montado! No nos llegaba con nuestro amiguito el Coronavirus que tenías que venir tu a tocarnos la narices. A ver, es cierto que en tierras gallegas nuestro amigo decidió no pasearse mucho, pero a los compostelanistas nos afectó considerablemente. Gracias al temporal de este fin de semana nuestro estimado Compos no pudo jugar su partido contra el Salmantino ¡con lo emocionados que estábamos con la vuelta del fútbol! Pero no, nuestro gozo en un pozo, ahora a esperar que se juegue y a ver que tal. A pesar de todo, tenemos que ver el lado positivo, ya que a partir de ahora, siempre que veamos la clasificación diremos: ”vamos en esta posición pero con un partido menos”.
Pero vamos a lo importante: el partido del próximo sábado. Porque a pesar de que el coronavirus se está cebando con los compostelanos y compostelanas, los aficionados podremos ir a ver a nuestro estimado equipo y así disfrutar de un partidazo que lo flipas. ¿os acordáis del partido de ida? ¡Cómo no lo vais a recordar! Si fue el ÚNICO partido que hemos perdido en toda la liga (pagamos la novatada). Pero ahora las cosas cambian, ya somos otro equipo completamente diferente al del primer partido de liga. Además, jugamos en nuestro campo, con césped natural, ahora a los que les va a costar adaptarse es a ellos.
Pero ojo ojito, que son los líderes, no vienen aquí de paseo, de hecho me da a mi que va a ser el partido más difícil de esta segunda vuelta (cuanto antes nos lo saquemos de encima mucho mejor), así que el próximo sábado los aficionados y aficionadas vamos a tener que dar lo máximo para demostrar que estamos con el equipo ¿ya tenéis preparado el kit? Tenedlo todo listo, porque a partir del sábado nuestro estimado Compos comienza la segunda parte del nuevo camino compostelano. Para este nuevo camino deberíamos andar con cautela, pero del mismo modo que lo hicimos hasta ahora. Preparemos una mochila con unas dosis de paciencia e ilusión y caminemos rumbo al destino más propicio: la continuidad. Que si después por casualidad nos acabamos desviando hacia otros caminos mejores, pues no pasa nada, pero nunca, y digo nunca, nos confiemos y acabemos vagando por los peores. A pesar de los pedazo pedrolos que nos encontraremos en este inseguro camino creo que hemos aprendido como esquivarlos, y si nos tenemos que tragar alguno que otro, pues nos lo tragamos, que tampoco es el fin del mundo (ya remontaremos).
Así que ya sabéis, estimados y estimadas, comencemos esta nueva andadura con buen pie, porque os aseguro que va a ser muy muy dura (pero dura que te cagas) y esperemos que al final acabemos en el sitio que realmente nos pertenece. ¡Con Dios!¡Portáos bien!
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