¡Dios mio! Que bien sientan estos partidos con goleada, si
es que los Choco Krispies han sido tan amables que decidieron el pasado Domingo
dejar al Compos a contentar a su público. 4 golitos que no vienen nada mal a
nuestro golaverage y uno de ellos de penalti, para quitarnos de una vez ese
fantasmilla que nos impedía marcar los penaltis.
Pues mira tu lo bien que estrenamos este nuevo Estadio Vero
Boquete, una goleada para homenajear a una gran deportista. Por cierto, curioso
que no haya estado Vero Boquete para inaugurar el estadio con un digno saque de
honor. Entiendo que el Compos se pondría en contacto con ella pero no estaría
disponible, eso espero… Hablando de todo un poco, y con todo el
respeto a nuestro actual entrenador, ahora que estamos con el tema Vero
Boquete. Entiendo que como jugadora nunca puede jugar en nuestro querido
Compos, pero…¿Y cómo entrenadora? No digo que tenga que ser ahora mismo, pero
sí que es cierto que una mujer puede ser entrenadora de un equipo de fútbol,
imaginaos el golpe sobre la mesa que daríamos con algo así, ¡sería la leche!. Y estaréis pensando “ya viene éste a ponernos
otra petición en change.org, si es que se repite como el ajo…” ¡Pues no,
listos! Que como siga poniendo esas peticiones chorras van a bloquearme la
cuenta… es una idea que dejo ahí, in the air… 🎵 Boquete is in the air….🎵
Pero dejemos a un lado las peticiones, y volvamos al partido
contra los choco krispies. He de decir que lo que más me ha gustado de este
último partido, a parte de los 4 goles metidos, es que hemos visto a una de las
grandes apuestas de este año, nuestro Miro Pereira particular, nuestro
delantero estrella canario, el jugador que nos va a hacer olvidar de una vez al
nuestro querido Primo (¿Qué no sabes porqué le llamo Miro Pereira?, pues échale
un vistazo a El Borrego Gallego y ya luego me cuentas…). Una asistencia, un
golazo y el que dio el pase que provocó el penalti… sin duda, un delantero de
esos que merece la pena tener por tierras compostelanas.
¿Y ahora qué? Os preguntaréis… Pues hay algo que no me saco de la cabeza… un tema que me corroe y me crea dudas, de hecho me he planteado
hablar con algún jugador del Bergantiños para que me vaya a comprar la lotería
de navidad... ¿Qué diablos hacen los bergantiñenses para tener tanta suerte? Si
es que cuando pierden nosotros no ganamos, y cuando parece que no van a ganar un
partido, llega el minuto 90 y ¡zas! golito al canto. Yo he buscado una solución
al respecto, y no se me ocurrió nada, porque la verdad tengo muy pocas ganas de
pensar, soy más de dejarme llevar. Así que no me queda otra opción que animar a
los aficionados compostelanos a llevar una pata de conejo a todos los partidos,
a ver si nos contagiamos un poco de esa suerte bergantiniana y volvemos a ocupar
el puesto que nos merecemos.
Y como yo me repito más que un Kebab caducado, hoy os voy a
hablar una trágica historia de un hombre que soltó una lágrima de tristeza.
Cada segundo que pasa, él os necesita más. No lo dudéis, queridos compostelanos
y compostelanas, una sóla firma vuestra puede sacarle una sonrisa. ¿Qué de
quien estoy hablando? Pues de quien va a ser, de el jugador más fugaz de la
historia compostelana, nuestro querido amigo Kostas Salapasidis. Un futbolista
que se merece mostrar su nombre en ese campo de entrenamiento compostelano. Así
que, si todavía no lo habéis hecho, id entrando aquí y firmad la petición anda,
que es gratis y no os cuesta nada.
Pues nada, después de rayaros un poquito más con el tema
salapasidesco, recordaros que este finde nos vamos a tierras carballinenses, no os olvidéis la pata de conejo, y llevad una Rebequita, que va a refrescar….
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